miércoles, 22 de marzo de 2017

Un enigma de fácil comprensión ¿Qué es la religión, y qué no?

Por una parte, la religión es ante todo un conjunto de normas prácticas para el correcto equilibrio del hombre con el universo, con la naturaleza y con los demás seres, humanos o no, incluyendo equilibrio consigo mismo y con la divinidad.
La religión ayuda al hombre a comprender de dónde se viene, qué se es, qué se hace aquí y adónde se va. La religión da sentido a la vida.
La religión “civiliza”, si entendemos por “civilización” el hecho de no ser salvajes, despiadados, desequilibrados. Con ayuda de la religión, y de sus influencias culturales, el hombre se culturiza, se desbestializa, en otras palabras, se humaniza.
Por otra parte, la religión no debe ser un medio para obtener poder o dinero. La religión no debe ser un medio para tiranizar a alguien o a pueblos. La religión no esclaviza, todo lo contrario, la religión libera, a los honestos en ella, de todo tipo de cadenas de opresión psicológica, ideológica, política, económica, pseudocultural o pseudomoral: la religión libera de toda cadena de opresión del salvajismo.
En conclusión, religión es libertad. Eso sí, así como todo ser tiene derecho a la libertad, también tiene el deber de ser responsable, de ser legítimamente inocuo.